martes, 1 de enero de 2013

Miédo escénico incluso a los hechos positivos



Cada día los departamentos de comunicación de distintas empresas suman y siguen en su posición cerrada pero cuando esa cerrazón es hasta cuando se van a contar o relatar informaciones sentido positivo no puedo por más que tirarme de los pelos y de la cabeza.
Viene esto a cuento por un hecho que sucedió hace unos días en un supermercado, no escribiré su nombre no escribiré su nombre no escribiré su nombre, de la calle Emilio Baró del barrio de Benimaclet.
Fue en la tarde del pasado 26 de diciembre. Una mujer, clienta se dice en el argot de los comerciantes, sufrió un ataque epiléptico y entre otros clientes y trabajadores del propio supermercado, no escribiré su nombre, no escribiré su nombre, no escribiré su nombre, la ayudaron y se llamaron a los servicios médicos.
Una ambulancia del SAMU y vehículo de la Policía Local, la otraSAMU y el otro coche estaban en la misma zona para otra atención, acudieron hasta el sitio para atender a la señora en el supermercado, no escribiré su nombre, no escribiré su nombre, no escribiré su nombre, y así lo hicieron.
Pues bien unos vecinos alertaron a este digital de la situación y se llamó a la Policía Local y al departamento de comunicación del supermercado, no escribiré su nombre, no escribiré su nombre, no escribiré su nombre, para cotejar los datos y lo que estaba sucediendo. Los primeros tardaron en confirmar los hechos, pero lo hicieron, y el segundo lo hizo y a partir de ahí empezó la historia curiosa cuando comentó que no pusierámos el nombre del supermercado.
Y me preguntó. ¿ Es tan malo contar una acción de ayuda a una clienta que ha tenido un ataque epiléptico? ¿ Acaso se les va a pedir a otros clientes o trabajadores que no ayuden para que esa situación no se sepa¿.
Entendería que lo plantearán sí se tratara de un atraco, que no lo es el caso, pero de eso ya habría fotos. O acaso pedirían que no se viera el nombre del supermercado en cuestión.
Miren fue un caso de ayuda de trabajadores del supermercado, no escribiré el nombre, no escribiré el nombre, no escribiré el nombre, a una señora y se hizo bien y no comprendo porque no se puede mentar el nombre en estas situaciones ¿ O acaso se van a dar órdenes a los trabajadores de que no atiendan estos casos? . Esto es miedo escénico. Lo entendería justificando sí se tratara de otra circunstancia.
Días más tarde el mismo supermercado anunciaba la donación de alimentos pero eso sí con su nombre y sin míedo. ¿ Donde está la diferencia ? 
Atentamente un usuario de los supermercados.